24.5.06

Marvels

Los cómics de superhéroes (tipos en pijama que vuelan, o corren mucho, o desaparecen y vuelven a aparecer, o mueren pero nunca del todo, etc...) suelen ser muy parecidos entre sí. Tienen muchas peleas tremendamente espectaculares, protas expertos en poner poses molonas y hacer larguísimos monólogos interiores y malos malísimos que también dominan el arte de las poses y los monólogos. Y generalmente aparece muy poca gente normal en ellos. Casi todo el mundo guarda un terrible secreto, lleva una doble vida y tal.

Por eso sorprende que un tebeo importante de una de las más importantes editoriales de tipos en pijama trate, precisamente, sobre gente normal. Sí, hay muchos choques de titanes, muchos tipos en pijama tanto buenos como malos, pero los verdaderos protagonistas de esta historia son gente normal. Tan normal como nosotros. Porque los protagonistas de esta historia son los testigos de las hazañas de los héroes, es decir, los protas somos nosotros, los lectores.

Marvels es un nada disimulado homenaje al universo marvel, una recapitulación en cuatro partes de los momentos más significativos de su historia, desde la aparición de los primeros supehéroes (la antorcha oríginal, Namor, el capi América...) hasta su, quizás, momento de mayor gloria, los maravillosos años 70 de los mejores 4 fantásticos y Spiderman. Y lo hace desde un óptica radicalmente realista, tanto en el guión como en el dibujo (¿O pintura? En realidad son acuarelas...).

El protagonista es un joven fotógrafo de prensa que, casi por casualidad, se especializa en fotografiar portentos. A través de su mirada somos testigos de acontecimientos clave del universo marvel, pero sobre todo somos testigos de las reacciones de la gente corriente, la sensación de indefensión, el desprecio hacia los superhéroes, la admiración que provocan... Se nos muestran los efectos de las megapeleas, los edificios derribados, las víctimas inocentes... Vemos como afecta, por ejemplo, la llegada de Galactus (que nunca ha sido tan impresionante como aquí) a una familia común y corriente (es decir, vemos como afecta a una familia normal la inminencia del fin del mundo...). Aplica a la mitología marveliana un tratamiento casi de ciencia ficción, serio y preciso.

Y que decir de las ilustraciones... Nunca un superhéroe ha sido tan verosímil. Con decir que hasta nos muestra las arrugas que se le hacen al pijama de Spiderman cuando trepa por los edificios... Abocetado a lápiz y acabado en acuarela, cada una de las páginas podría colgar de las paredes de un museo, pero lo mejor de todo es que en ningún momento olvida que lo importante es explicar la historia. Fabuloso.

Si todos los tebeos de tíos en pijama fueran como éste sería mucho más fácil explicar por qué los sigo leyendo.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Vaya. Precisamente acabo de leerlo e iba a hablar sobre él.

Juanma Sincriterio dijo...

¿Me he adelantado? Jeje, no me lo tenga en cuenta... Ha sido sin querer... Pero no se corte y hágalo, así contrastamos impresiones.
Un saludo, mangarran!

Anónimo dijo...

No, no. No digo que te hayas adelantado, sino que es coincidencia. (De tú, por favor)
Saludos.

Juanma Sincriterio dijo...

Hecho, compañero.
Oye, ¿Para cuándo más fotos de la Johanson en tu blog demente? Coincido contigo (también) en que mola...

Anónimo dijo...

No te preocupes por la Johansson, que siempre hay un hueco en el blog y al final hasta acabarás harto de ella...