Marchando un meme cortesía de
Kalimero. Y uno de los buenos, además:
Canal odio, o una lista con las 20 series de televisión más odiadas por un servidor. No ha sido fácil seleccionar entre tanta serie desastrosa como hay por ahí, pero tras un arduo proceso de eliminación aquí están las 20 series más odiadas por vuestro seguro servidor. Seguramente las hay peores, pero aquí no hablamos de calidad, sino de odio. Y hay pocas cosas que odie más que estas 20 series:
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The Cosby Show: Bill Cosby, el negro no-soul primordial, una colección de muecas estúpidas hechas persona. Y ese baile en los créditos... Solo ver Lisa Bonet evitó que me suicidara durante su emisión.
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Un paso adelante: No es ninguna sorpresa que fuera una porquería: A medio camino entre Fama, que era deprimente, y OT, generadora de vómitos sin igual, de aquí no podía salir nada bueno. Ni siquiera regular. Y casi ni malo...
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Verano azul: Las mejores mentes de una generación traumatizadas sin remedio. Y como el experimento funcionó, lo volvieron a intentar con la siguiente generación. Y con la siguiente. Y con la siguiente. Y... La tipa con la guitarra, la pandilla insufrible... Chanquete murió, pero por algún motivo sigue apareciendo en mis pesadillas.
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Friends: Media docena de lerdos diciendo tontadas sin medida ni control tienen muy poco que ver con mi idea de la diversión, la verdad. Y Jennifer Aniston merece ser enterrada hasta el cuello al lado de un hormiguero.
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Mr. Bean: Black Adder molaba, pero porque salía House poniendo caras. Atkinson en solitario me provoca urticaria. Es que no puedo con este hombre, oye...
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Salvados por la campana: Si estuviera encerrado en una habitación con los protas, una pistola y una bala no sabría a quién disparar. Probablemente me suicidaría.
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Fiscal Chase: Qué suerte tienen los yankis, que tienen a esta fiscal que persigue a los malhechores mientras hace pucheros...
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Periodistas: Y por extensión cualquier producto en que aparezcan Coronado. Con o sin yogures. Si además va acompañado de Belen Rueda, es inevitable huír.
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Nikita: Esta rubia hiperoxigenada, con cara de no entender para qué son todas esas cámaras que la están filmando, es un buen motivo para permanecer lejos de Canadá.
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Entre fantasmas: Tan puesta siempre, tan mona, tan simpática, tan buena gente, tan dispuesta a reconciliar a todo el mundo vivo o muerto, tan PANOLI... No es raro que solo los muertos la soporten.
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Autopista hacia el cielo: Una tarta de nata cubierta de algodón de azucar bañada con chocolate líquido hundida en una capa de merengue y todo bien regado con azucar de caña. La muerte segura, vamos.
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Renegado: ¿El rey de las camas haciendo de Chuck Norris de segunda? No, gracias.
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Aquí no hay quien viva: ¿Por qué grita tanto todo el mundo?
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Sexo en Nueva York: La versión pavisosa de los cuatro jinetes del apocalipsis.
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24: Vale, al principio, por la sorpresa, estuvo bien, pero la pura apología fascistoide en que se ha convertido junto a la permanente cara de estreñido de Jack Bauer me han hecho aborrecerla.
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Blossom: Blossom es el mal. Y punto.
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CSI Miami: A este paso David Caruso va a dar una nueva dimensión a la palabra "encasillamiento". Toda la puta vida interpretando a polis pelirrojos y lo único que ha aprendido es a ladear la cabeza...
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Seinfeld: Monólogos con cero gracia (con suerte), historias estúpidas... No es que la serie no trate sobre nada, es que no es nada.
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Hostal Royal Manzanares: Antes de Ana Obregón existió Lina Morgan, que era mucho más nociva. Pero es que en esta tortura china por capítulos coincidieron ambas primordiales. El horror...
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Farmacia de guardia: No sé si fue la primera, pero en mi cabeza es la responsable del descenso a los infiernos que es la ficción televisiva hispana. Esos viejunos tan azucarados y comprensivos, esos jovenzuelos tan traviesillos... La semilla del apocalipsis.
Ala, ahí queda eso. Y ya por pasar el meme, pues lo paso a
Rusoazul (por aquello de devolverle la jugada, jejeje) y a
Foliot (tengo curiosidad por su respuesta, la verdad). Y a todo aquel que quiera hacerlo, por supuesto.
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