Ese invento del demonio, el mal en estado puro, que es el facebook a veces (agarraos) sirve para algo. Sirve, por ejemplo, para que a un par de señores les de por recordar a Melissa Auf Der Maur. Uno se acuerda de su existencia y otro ve en ella el mundo como debería ser si hubiera algo más de sentido común repartido por ahí. Otro (yo mismo, para qué engañarnos) lleva un par de días publicando clips suyos en su círculo particular del infierno. En otras palabras, llevo un par de días celebrando La Belleza. Así, en general, y la de Melissa Auf der Maur en particular. Y todo culmina aquí, porque no hay mejor manera de resucitar un blog comatoso que con un chute de...
Porque Javi (Iglesias) tiene razón, siempre nos quedará Melissa. En lo físico y en lo profesional. Incluso en lo mítico. La figura casi sobrenatural de una mujer empuñando una guitarra (o un bajo, ¿importa?), el talento supurando, el poder... porque hace falta mucho poder para transformar el Paranoid de Black Sabbath en algo tan... bueno, sexy.
Casi nada... La lástima es que no se prodiga demasiado. Pero hasta para eso estamos de suerte, ya que este repentino (y algo chorra) deseo de celebrar La Belleza a través de Melissa Auf der Maur (ya casi la podemos llamar Melissa a secas, ¿no?) que me ha entrado repentinamente coincide casual/sincrónicamente con el que parece que va a ser Su año. El año de su nuevo disco, el segundo (sin contar un directo de versiones de los Sabbath, Hands of doom), la banda sonora de una película (cortica) protagonizada por ella misma, Out of our minds. ¿Molará? Da igual, el disco seguro que sí. Lo que está por ver es si superará la nómina de colaboradores de su debut. Más que nada porque mejorar a Chris Goss, Josh Home, Lanegan... borda lo imposible. Pero si alguien puede...
Por todo eso ya es oficial: A partir de ahora mismo, el 23 de enero es el día elegido por un servidor de ustedes para celebrar La Belleza. Porque sí. No hacen falta excusas.
No para disfrutar de algo así.
Última hora: Javier esteban cierra el círculo y Francisco Javier Pérez (yo que vosotros iba encargando su inminente Antifuente en la librería más cercana. Quien avisa...) se encarga de poner el broche a esta celebración que nos hemos sacado de la manga.